Por Marco Albertazzi
Como candidato a la presidencia de la República, Rodrigo Chaves prometió quitar 114 impuestos[1]. Sin embargo, una vez en el cargo pareciera haber olvidado su promesa de campaña. Como diría mi mamá, “siempre que pasa lo mismo, sucede igual”, pues la carga impositiva que sufrimos (sí, sufrimos) los costarricenses, es enorme.
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Los diputados del Partido Liberal Progresista (PLP) en la Asamblea Legislativa, lograron alivianar un poco esa carga impositiva con la disminución del monto, aún excesivo, que pagamos anualmente por el derecho de circulación de vehículos, conocido popularmente como “marchamo”. Esto fue algo que no hizo muy feliz al ministro de Hacienda ni al presidente Chaves. No olvidemos que además de este impuesto también pagamos por nuestros vehículos el Impuesto sobre el Valor Agregado (IVA) incluído en la inscripción de vehículos nuevos o el impuesto por traspaso en el caso de adquirir un vehículo usado. También pagamos la revisión técnica vehicular, impuesto a los combustibles, e iva en todos los accesorios y repuestos, entre otros.
Continuando con su propósito, Eliécer Feinzaig, diputado del PLP, ha propuesto el proyecto de ley No. 24.207, que pretende bajar el impuesto sobre los tiquetes aéreos dentro de Centroamérica y República Dominicana, haciendo que un viaje ida y vuelta llegue a costar en promedio entre US$100,00 y US$120,00. A esto, el presidente Chaves y el ministro de Hacienda se han opuesto rotundamente[2], dado que –según ellos– este proyecto de ley generaría un hueco fiscal de ₡3.500 millones de colones. En ese sentido, es necesario indicar que estos ₡3.500 millones representan apenas 0.028% del presupuesto de la República del 2025 por lo que más que un “hueco fiscal” pareciera ser un “porito fiscal”. Teniendo esto en consideración, vale la pena preguntarnos: Al no ser un tema realmente económico de impacto nacional, ¿será que están protegiendo algunos intereses específicos?
Sin embargo, esto podría no ser cierto. A continuación, expongo nueve razones del por qué se debería dar el resello a la ley No. 24.207, contribuyendo al bienestar de los usuarios.
1- Es inmoral: No se creó al pueblo para servir al Estado, sino el Estado para servir al pueblo. Pero más allá de eso, el objetivo de una sociedad no es alimentar al fisco y mucho menos, ser gravada con impuestos para mantener a grupos con intereses particulares o a burócratas que parasitan nuestra sociedad. Esto es inmoral. El bienestar del individuo es el fin último. Dado que el Estado nos mete la mano en el bolsillo a todos para quitarnos nuestros recursos y dárselos a aquellos que han sabido hacer lobby para enriquecer sus bolsillos a costa de todos nosotros.
2- Libertad económica = capacidad creativa: Al tener vuelos baratos, se abrirían oportunidades valiosísimas para el turismo, para el comercio internacional, para tratamientos médicos, para estudio, en fin, cosas que aún no se han siquiera imaginado, porque precisamente eso es lo que sucede cuando hay libertad económica: la capacidad creativa e inventiva del ser humano despierta y crea nuevas oportunidades.
3- Encadenamientos productivos: El desarrollo del turismo y el comercio internacional, entre otros, a su vez aumentaría los encadenamientos productivos favoreciendo la hotelería, la industria restaurantera, el consumo de bienes y servicios, los que por cierto, también generan recaudación fiscal.
4- Aumento del empleo: Indivisiblemente la libertad económica, la inventiva del ser humano, el aumento de los encadenamientos productivos conllevará a nuevos proyectos empresariales que a su vez necesitarán de personal de trabajo y que crearán nuevos encadenamientos productivos. Esto es un ciclo de prosperidad que podría traer un beneficio ENORME para el país y consecuentemente una mejora en el bienestar de las personas, en la reducción de la pobreza
5- Mayor consumo de bienes y servicios: gente con mejores ingresos creados de forma sostenible por la creación de empleo y empresas, obviamente van a derivar en un aumento de la capacidad adquisitiva de las personas, con lo cual también se mejora su nivel y calidad de vida y, consecuentemente, su desarrollo personal, llevándoles a aspirar a más y mejores bienes y servicios, con lo que a su vez se mejora la competencia y por ende, la competitividad.
6- Mayor desarrollo: Al haber más personas visitando nuestro país, haciendo negocios, creando empleo y encadenamientos productivos, consumiendo productos y servicios, evidentemente habrá un mayor desarrollo a nivel de infraestructura, de tecnología, de industria, etcétera y, por lo tanto, un crecimiento económico para el país como un todo.
7- Mayor competencia y competitividad: Con el objetivo de mantenernos competitivos frente a los demás países de la región, comenzar a reducir paulatinamente otros impuestos, a la vez que empresarios busquen disminuir sus costos productivos e incluso ajustar algunos de sus márgenes de ganancia, hará que los precios de los productos y servicios ofrecidos y demandados sean menores, incentivando el libre comercio y la competitividad. Esto sin duda alguna produciría un enorme beneficio para todo el país y quizá quienes nos visitan (y nosotros mismos también) dejarían de decir que este es un país muy caro.
8- Riqueza para todos: Pero incluso más allá de la creación de competencia con otros países de la región, podría llevar a la creación de un cluster o hub regional, en el que más allá de pequeños países “peleándose” por atraer la mayor cantidad de viajeros, podríamos realmente convertirnos como región en un centro turístico integrado, en donde europeos, asiáticos, oceánicos, africanos, norte y suramericanos puedan venir a experimentar en un solo viaje (ya no de una semana sino por unas dos o tres y tal vez hasta un mes) las maravillosas playas de Costa Rica y de República Dominicana, la espectacular Surf City de El Salvador, la mágica Antigua o la mística ciudad Tikal en Guatemala y tantos otros destinos (como sucede cuando cruzamos el charco para ir a Europa y aprovechamos para visitar varias ciudades de España, Italia, Francia y del resto de Europa.
Pero no solo eso, sino que fomentaría el turismo, el comercio e incluso, las relaciones dentro de la región para los mismos centroamericanos. En fin, el potencial es incalculable para toda la región. Y no podemos tener ese pensamiento estatista y esa actitud egoísta que nos priva de bienestar solo porque unos están pensando “¿y yo que gano con esto?”.
9- Mayor recaudación: Partiendo de que rara vez el Estado sirve al individuo (como debería de ser), y mayoritariamente se sirve de éste, al considerar la Curva de Laffer –que mide la relación entre los impuestos y la recaudación fiscal, estableciendo que a menos impuestos hay una mayor recaudación y de manera paralela, que a más impuestos hay una menor recaudación–, esto en vez de crear un “hueco fiscal” podría producir muchísimos ingresos para el país en un efecto dominó. Además, el incremento del tránsito de personas en nuestro país pagando menores impuestos, compensaría los grandes impuestos que pocos pagan. Lo digo de una forma más sencilla: es mejor que muchos paguen poco a que pocos paguen mucho. Esto beneficia al individuo, al ciudadano de a pie, que es precisamente al que el Estado debería servir.
Esto verdaderamente podría ser la sacudida que el país necesita para fomentar las políticas de libre comercio y de desarrollo que tanto hemos necesitado desde hace tanto tiempo, llevándonos a adaptarnos al mundo que hoy nos reta y soltando las amarras de las imposiciones del gobierno y de los intereses de algunos a quienes se busca proteger a costa de todos, lo cual sin duda es inmoral, y quizá de paso, nos lleve a remozar nuestras ciudades y mejorar nuestra infraestructura para atraer a más personas.
Las posibilidades y las oportunidades son infinitas, pero debemos saber aprovecharlas, por lo que invito a todos los diputados a no ser la piedra que impide el avance del país y a decir #SíAlResello y a votar por un futuro próspero no solo para Costa Rica y su gente, sino para toda la región.
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[1] https://www.facebook.com/watch/?v=385221646660618
[2] https://observador.cr/si-lo-vetan-lo-vamos-a-resellar-avisa-eli-feinzaig-sobre-el-proyecto-de-vuelos-baratos-a-centroamerica/
